Abelardo Castillo. Perfil Libros – BitácoraNo se debería escribir sin antes visitar estas páginas de Castillo.
El libro me lo regaló Salem, luego de verme estropear párrafos impunemente.
No es un manual, no hay tratados ni reglamentos. El autor cuenta su experiencia literaria de manera tal que uno tiene la sensación de estar escuchándolo hablar en una mesa de café (estimo que así fue escrito).
Las recomendaciones tienden más a lo que no se debe hacer que a la estricta técnica de cómo escribir.
Dice Castillo: “Si tiene tendencia a escribir cristal, en vez de vidrio; rostro, en vez de cara; ascender, en vez de subir; o utiliza expresiones como ¡bingo!, pantaletas, carrusel, dése una vuelta por el mundo real.”
“Lo que llamamos estilo sucede más allá de la gramática. No es lo mismo decir: “ahí está la ventana” que “la ventana está ahí”. En un caso se privilegia el espacio; en el otro, el objeto. Toda sintaxis es una concepción del mundo.”
Aunque el intento de Salem no haya funcionado en mi, es bueno tener en cuenta este libro tanto para leerlo como para regalarlo o robarlo, llegado el caso.
Termino con otra sobre el estilo.
Castillo cuenta que a los 17 años fue a un taller literario. Le empezó a leerle al profesor el cuento que había llevado; éste lo interrumpió para ametrallarlo a preguntas acerca de las primeras oraciones, bastante toscas. “Yo tenía diecisiete años –cuenta Castillo-, una altanería acorde con mi edad y ni la más mínima respuesta para ninguna de esas preguntas. Lo único que atiné a decir, fue: Bueno, señor, porque ese es mi estilo. El profesor, mirándome como un lechuzón, me respondió:
-Antes de tener estilo, hay que aprender a escribir.”
16 Comentaron sin empacho:
ese es un libraso
felicitaciones por la vuelta martin
fernando
un saludísimo rechoncho, martín
(poquito, pero se te quiere)
sabeli
(me encantó tu reseña)
Fernando, Castillo es un Maestro. Gracias por pasar.
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Sabeli, qué gusto verla aparecer por acá. Que me quiera (poquito) es lo máximo que he conseguido en mis 32 años.
No está tan mal.
Espero seguir encontrándola.
Martín me alegro de que hayas vuelto.
Me alegro muchísimo.
Pasate un día por mi blog, no te pido el sacrificio de leerme, solo la alegría de ver que pasas a saludar.
Un abrazo.
Deberías consultar las estadísticas de tu blog, amiga Blanca, para ver que efectivamente siempre te visito. Y te leo.
Es un gusto estar otra vez en el ruedo... y ser recibido por amigos...
Gracias
Yo también me alegro de tu vuelta. Te conozco por Blanca. Ella habla maravillas de ti.
Encantada por su vuelta!
Querida Siberia, gracias por venir hasta acá. Quiero decirle dos cosas.
1)Usted ya está agregada en la lista de enlaces de este módico Blog.
2)Con respecto a que Blanca habla bien de mí, debo decir que es porque una vez con los miembros del Concepto DFyD logramos realizar una suerte de hipnosis (mezclada con espiritismo) vía Mns y le lavamos el cerebro. Cuando Blanca despertó de ese sopor letárgico, comenzó a hablar maravillas acerca de nosotros. Eso lo explica todo.
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Lununa, tantísimo tiempo sin saber de usted... qué gusto enorme encontrarla en esta humilde choza. Sea bienvenida.
ZZzZzz
oye cómo va
tu riiitmo
bueno pa gozá
mulaaaata
gur mornin mai díe
(no digás que no telo
dije)
tenemos en casa ese libro (de hecho me lo regaló mi novio). Y sí es muy entretenido.
Pero discúlpeme, me quedo con "mientras escribo" de King.
De aquí en más que la gente saque sus conclusiones.
:)
Atractiva síntesis, Don Martín. Tendré en cuenta la recomendación, q parece muy interesante.
Y aunq no fui testigo de su partida, siempre reconforta saber q alguien persiste en los intentos :)
Viruta, perdone que no la acompañe; soy muy desafinado. Pero usted es tan entonada que hasta una cumbia villera suena bien en su garganta… Ah, y ese pasito que hace de bailarina de pasión tropical…
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Lorena, queda disculpada por preferir el libro de Stephen King por sobre el de Castillo. No es mi caso, como ya he dicho. Pero para que no se pelee conmigo también, (ya se peleó con una pava eléctrica en el post de abajo) le digo que estoy ahora releyendo una novela del loquito lindo de Stephi (así le digo yo en confianza), de cuando escribía bajo el seudónimo de Richard Bachean. En Breve se lo comento. Gracias querida Lorena (y deje en paz a mi pavita posmoderna).
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Clandestina, vaya, con ese nombre me hizo pensar en alguien con una remera que dice Agente Secreto (esto creo que lo vi en Los Simpsons).
Qué menos que persistir en los intentos, Doña Clandestina. Resisto ahora la tentación de ponerme Dolinesco con el tema, pero sepa que lo ameritaría. Me voy a seguir insistiendo; en este caso, con la mala maña del trabajo.
Volvió:) Celebro por eso, Martín, y le mando un abrazo oncativense.
Procedo a leerlo!
No se os ocurra pinchar en el coment que dice "mira aqui" Here
es un virus
Martín deberias suprimir ya ese comentario
saludos a todos.
Elena, qué alegría me da verla por acá.
Espero sus agudas opiniones.
Le retribuyo su abrazo oncativense
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Blanca, gracias por el dato. Ya me informó Siberia por mail cómo borrar eso. Me hizo un manual de instrucciones detalladísimo. Un encanto.
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