martes

JULIO ALFONSO*

El día que puedas


El día que puedas, no sé, mañana, un día de éstos, quiero que me mandes vía correo –o en el vuelo rasante de ese beso que quedó impar -, aquellas cosas que me pertenecen, como los libros de Pablo, los versos de Girondo y algunos recuerdos que eran míos, aunque los hicimos juntos.

El día que puedas, no sé, mañana, pasado mañana, una nube de éstas, quiero que me regreses el muchacho que fui, ese soñador que contaba las estrellas que faltaban para llegar a tu casa.

El día que puedas, que sé yo, hoy, mañana, el menguado de luna que viene, quiero que me envíes vía recuerdo toda la alegría que cierta vez te presté sin la condición de que la regreses intacta y prolija.

¿Quién soy? Sabía que no me reconocerías. Soy el que ayer hiciste en tus ratos de ocio, el que ya no se parece a sus sueños, el que justifica tu olvido, pues por entonces no estaba en las palabras, sino en tus silencios. Soy aquel que todas las noches desprendía una estrella para prenderla en tu pelo; el muchacho que no sabía hablar y aprendió a relatar sin sentidos deletreando tu nombre.

Por eso: el día que puedas, hoy, mañana, durante el descuido de tu cancerbero, el olvido, necesito que me envíes la fórmula para olvidarte y curar así aquel traspié de un beso.

Preguntarás por mi premura. Ocurre que debo emprender nuevos amores. Y esto se sabe: un viejo guerrero del alma no puede encarar otras batallas sin zurcir primero viejas heridas. De ellas nace mi pedido, que me envíes la fórmula del olvido. Si ello ocurre, he de recordar con gratitud ese gesto tuyo, tan parecido al amor, cuando no militábamos en proyectos de broncas y de arrugas.

(*) Julio Alfonso es mi Maestro para siempre. El primer escritor en serio que conocí en mi vida y al que le debo y le deberé siempre por sus inagotables enseñanzas, café mediante. Un hombre que hacía maravillas con lo cotidiano. Alguien imposible de no extrañar.

1 Comentaron sin empacho:

Anónimo dijo...

Hola, querido Julio, prendida de tu poema, no quise mirarme a los espejos¿ què te parece hacer mùsica en el sòtano de " La Isla " con Alejandro DOndas ? Dale flaco, vamos...